M.C. Kevin Omar Ponce Palomera
Este estudio se enfoca en la toxicidad de aguas residuales tratadas que son producto de crecimiento urbano. Se advierte que las plantas de tratamiento de aguas residuales no logran eliminar completamente todos los contaminantes, lo que lleva a la presencia de contaminantes tradicionales y emergentes. Los contaminantes emergentes son preocupantes debido a sus efectos tóxicos aún desconocidos, mientras que tanto el amonio como el cloro utilizado en la desinfección del agua son nocivos para los organismos acuáticos.
Se ha observado que las aguas residuales tratadas pueden causar efectos tóxicos en embriones de pez cebra, incluyendo mortalidad y malformaciones. El estudio se centra en evaluar la toxicidad de aguas de dos plantas de tratamiento en la Bahía de Banderas, Jalisco-Nayarit, utilizando embriones de pez cebra como modelo. Se llevan a cabo pruebas de toxicidad aguda y crónica, y se analizan diversos parámetros para determinar los efectos en el desarrollo y la reproducción de los peces expuestos.
Los resultados demuestran que las aguas residuales tratadas pueden provocar mortalidad, malformaciones, retraso en la eclosión y disminución de la fecundidad en el pez cebra. Estos hallazgos subrayan la importancia de una gestión adecuada de las aguas residuales para proteger tanto la salud humana como el medio ambiente.